Director de pelicula «La Deuda», Juan Carlos Mege, busca financiamiento para la postproducción de la pelicula que trata sobre historias reales de profesores que fueron afectados por la «deuda histórica de los profesores», para dejar un legado y que los profesores recuperen su lugar en la sociedad.
ENTREVISTA: Francisco Calderón M. FOTOGRAFÍA: Juan Carlos Mege

¿CUÁL ES EL PROBLEMA DE LA DEUDA HISTÓRICA?
El problema de la deuda histórica surge cuando la dictadura, desmejoró a los profesores y profesoras de Chile en el marco del proceso de municipalización de la educación pública. No se cumplió con un bono de reconocimiento comprometido a los trabajadores públicos, con el tiempo eso generó un deterioro en sus ingresos, por lo tanto, muchos profesores fueron perjudicados y esto afecta hoy sus pensiones en forma considerable. Es un problema grave que aqueja a docentes adultos mayores, momento del ciclo de vida en que más se necesita una estabilidad económica y este daño provocado por el actuar del estado no lo hace posible. Es lamentablemente el caso de miles de profesores y principalmente profesores jubilados. La lucha por la restitución de lo que representa un derecho legítimo, la vienen dando los profesores y principalmente las profesoras desde hace varias décadas.
En segundo lugar, tiene que ver con una cuestión más política y bien perversa, pues con el retorno de la democracia, ningún gobierno se ha hecho cargo de reparar este tema, pero si lo siguen utilizando permanentemente en los discursos de las campañas electorales. Todas las coaliciones políticas han usado el tema de la deuda histórica como slogan, reconociendo que es una reivindicación justa que se comprometen a resolver, y ese compromiso, una vez asumido el gobierno, es olvidado una y otra vez. Eso es tremendo y genera mucha impotencia.
- ¿Qué LOS MOTIVÓ A HACER ESTA PELICULA?
Mi principal motivación tiene que ver con entender esto como un problema humano, un problema de derechos humanos que ha generado deterioro en las personas, en su calidad de vida, por lo tanto, hay un compromiso social que nos moviliza.
No se trata solo de una reparación de carácter económico, no es únicamente eso, hay un tema moral, político y social, muy fuerte a la base ¿Por qué una sociedad no se hace cargo y resuelve un problema de este calibre? ¿Por qué se perpetúa la injusticia por tantas décadas?
Yo diría que esas preguntas me inquietan mucho, y por muchos años hemos sido testigos de todo esto, una especie de continuismo entre dictadura y democracia en muchos sentidos. El hecho de ser educado en un país, donde tú te das cuenta de las injusticias de manera cotidiana, me parece que es un motor desafiante para muchas cosas, para pensar, para crear, para denunciar, para transformar ojalá. Son problemáticas sociales de alto impacto que han ido en aumento y el hecho de que no se resuelvan, sino que más bien se profundicen es algo imposible de aceptar y normalizar, es algo que nos golpea, que nos debe golpear.
- ¿CÓMO SON LOS PERSONAJES DE LA PELICULA Y COMO SE RELACIONAN CON LA DEUDA HISTORICA?
Para responder esa pregunta, es importante relatar primero cómo comenzamos este proceso. Este proceso está hecho de temas reales, por lo tanto, más que personajes hay personas que han vivido esta situación, sin poder mejorar sus vidas. Hicimos un trabajo de levantamiento de situaciones, de historias, de anécdotas que nos fueron contando, en la casa del maestro, unos cuantos meses, y con eso creamos el guion de esta película. Los personajes tienen que ver con esos temas reales, y los personajes hablan de estas cosas. Alicia, por ejemplo, es una mujer que esté postrada, enferma y sin los recursos para enfrentar su situación, entonces su ánimo decae. Con el estallido de octubre como telón de fondo, y con todo lo que sucede en ese momento de la revuelta social, Alicia despierta y vuelve a incorporarse a su vida y a sus luchas. Por otro lado, está Armando, que es un profesor que vive bajo un puente, un personaje que ha tenido que vivir al margen por diversas circunstancias.
- ¿Dónde FILMARON ESTA PELICULA? ¿Cómo LO HICIERON PARA FILMAR?
Estas son películas que tienen un fuerte juego, un contrapunto con el género documental, son ficciones donde nosotros ocupamos los escenarios y situaciones naturales, por lo tanto, trabajamos con personajes que hacen de ellos mismos. Y mostrar esa lucha que se va dando por visibilizar este problema. Hemos filmado en Concepción, Talcahuano, Lota, en comunas de Santiago como Maipú, en el centro, porque ahí también suceden las protestas, en la plaza de la Constitución todos los jueves, son imágenes que nosotros ocupamos, ahí hacemos nuestra película, y en Valparaíso se hizo gran parte también porque ahí vive Alicia, que es la protagonista, la actriz Grimanesa Jiménez.
- ¿ESTA PELICULA LA HAN VISTO PROFESORES, QUE REACCIONES HAN TENIDO?
No hay reacciones con la película, porque no está terminada aún, pero si se han visto adelantos, toda la experiencia de filmación, ha sido un bello proceso, y hubo una buena recepción con las profesoras y profesores, están muy contentos, están muy interesados en que podamos terminarla pronto, porque la verdad, ellos tampoco están detrás de la reparación económica solamente en este reclamo, es un reclamo que tiene que ver con un tema de dignidad y de justicia, en definitiva, recuperar su lugar en la sociedad. Es un tema de respeto. Esta película se está produciendo con los aportes de las mismas personas que actúan en ella, ha sido autogestión desde las propias organizaciones.
- ¿HAY ALGUNA ANÉCDOTA QUE SE PUEDA CONTAR DURANTE LA REALIZACIÓN DE LA PELICULA?
Yo diría que la anécdota más interesante, es que de alguna u otra forma en el proceso se ha ido confundiendo lo que es la ficción con la realidad política, porque el tema siempre ha estado en la palestra. Es nuestra realidad en gran parte, pero también es una fantasía, una ficción, es algo inventado. Ha sido casi anecdótico, no sabemos cuando estamos hablando de la realidad o estamos hablando de la ficción y eso creo que generará un impacto importante en el espectador cuando vea la película. Tanto es así que pasó algo muy divertido y bonito a la vez, cuando fuimos con Grimanesa y Belén, las protagonistas de la película, a una entrevista en un canal privado (víaX), la periodista al verlas creyó que eran abuela y nieta de verdad, las encontró muy parecidas.
- USTEDES NECESITAN 10 MILLONES, ¿POR QUÉ ES IMPORTANTE RECAUDAR FONDOS?
Es importante porque no hemos tenido ningún apoyo institucional concreto, hemos hecho un montón de solicitudes, en ministerios, gobernaciones, distintos sitios y poco hemos logrado, entonces necesitamos levantar fondos, porque las películas necesitan fondos en Chile y en todas partes, para distribuir una película, para que esta se vea realmente, hay que pagar.
Nosotros hemos desarrollado un cine que es cooperativo, que es la forma en que yo trabajo, siendo parte de una red internacional de cine cooperativo, y eso nos ha permitido desarrollar la película, pero se llega a un punto en que no podemos apelar solo al apoyo y la voluntad de compañeros y amigos, se requieren recursos para financiar el trabajo en esta última fase.
- ¿Cómo HA SIDO SU EXPERIENCIA REALIZANDO LA CAMPAÑA DE LA PELICULA, COMO SE LAS HAN INGENIADO, QUE HAN HECHO?
Hemos realizado distintas actividades, hemos hablado con distintas personas, con grupos, hemos hecho colectas, rifas, hemos estado presentando el proyecto en los concejos municipales, con empresarios regionales, ahora estamos haciendo un crowfounding, para la última etapa, bingos, hemos donado arte para que sea rematado, todo se ha hecho de esa manera.
El equipo de trabajo hace otras cosas, yo soy pintor y artista plástico, por ejemplo, entonces todo eso ha servido para iniciar el trabajo.
Gran parte esto se ha financiado a partir de los mismos profesores y profesoras afectados, ellos están muy interesados, me invitaron a filmar esta película, para contar en parte sus historias, para que quede un legado, se vea, se entienda y ojalá nunca más ocurra. Es una película de denuncia.
- ¿Cuál ES EL LEGADO QUE QUIEREN DEJAR CON LA PELICULA?
El principal legado es mostrar a las nuevas generaciones que no se puede claudicar en la búsqueda de la dignidad, es un testimonio, una voz desesperada de los y las profesoras de Chile.
Cuando me convocaron para poder hacer público esto, me pidieron que no se viera solo como un slogan político sino, como una situación humana lo que ha ocurrido. No es solo un tema político global, es un tema que deteriora la vida de una persona, de muchas personas cotidianamente al punto de no tener los recursos para acceder a las cosas básicas que requiere un ser humano para vivir. En este caso docentes que entregaron su trabajo y esfuerzo a la formación de todos nosotros.
